sábado, abril 07, 2007

El feng shui para las entrevistas de trabajo o cómo conseguir empleo haciendo tonterías

Yo creo algo en el feng-shui: estoy de acuerdo en que en la casa (y en la vida de uno) hay que tener las cosas dispuestas de una manera armoniosa para conseguir un estado de ánimo agradable. Lo que en ningún caso me esperaba encontrar es un así llamado "feng shui del trabajo" (vía) o de cómo conseguir trabajo, donde los consejos que se dan son, cuando menos, pueriles y ridículos. Copio debajo el texto original para dar idea de tamaña guía para conseguir empleo:

  • No pierdas de vista tus logros anteriores, por mínimos que parezcan. Conseguir un trabajo requiere tener buenos antecedentes: coloca en tu cuarto, en la esquina más alejada de la puerta, un diploma, fotografía u objeto que tenga que ver con tus logros profesionales o académicos y que sea clave para el trabajo que buscas.
  • Mantén la motivación. Coloca en un lugar bien visible (enfrente de tu escritorio o de tu cama) algo que represente el trabajo que quieres lograr. No importa si recortas una foto de una revista en donde se vea a alguien trabajando: busca la manera de tener algo que te muestre el objetivo al que quieres llegar.
  • Usa tu mejor dirección. Toma los dos últimos dígitos de tu año de nacimiento (si naciste antes del 4 de febrero, toma como año de nacimiento el año anterior). Lleva el resultado a un solo dígito, por ejemplo, si naciste el 19 de enero de 1968, toma el año 67, 6+7=13, 1+3=4.
    Al número resultante las mujeres deben sumarle 5 y los varones deben restarlo de 10. Siguiendo el ejemplo anterior, si eres mujer 5+4=9 es tu número. Si eres varón 10-4=6 es tu número. Si al sumarlo a 5 resulta un número de dos dígitos, vuelve a reducirlo a uno solo: el resultado debe ser siempre un dígito del 1 al 9.
    Si tu número es 1, 3, 4 o 9, tus direcciones favorables son el Norte, el Sur, el Este y el Sudeste.
    Si tu número es 2, 5, 6, 7 u 8 tus direcciones favorables son el Oeste, el Noroeste, el Noreste y el Sudoeste.
  • Es muy importante que realices tus llamadas o actividades de búsqueda de trabajo siempre mirando hacia alguna de tus direcciones favorables.
  • Despídete bien de tu hogar: Coloca una foto de tus seres queridos o alguna cosa que te de ánimo y energía cerca de la puerta de tu casa, de modo que la veas antes de salir y te despida con buenas energías para tus entrevistas de trabajo.
  • Usa el color adecuado para las entrevistas: si quieres parecer activo, usa algo rojo, si quieres parecer confiable y serio usa colores terrosos o azul, verde si la creatividad es importante, violeta para transmitir jerarquía e individualidad, naranja para transmitir capacidad de trabajo en equipo, blanco para trasmitir franqueza y honestidad ¡Suerte!
Algunos de ellos son obvios (mantener la motivación), otros son sencillamente ridículos (hacer las llamadas de trabajo siempre mirando en cierta dirección). Aunque no dudo de que, en ciertos casos, haya algunos dispuestos a seguir cualquier consejo con tal de conseguir lo que sea (incluso el amor eterno quemando rabos de culebra a la luz de la luna en cuarto creciente y quemando incienso mientras se salta a la pata coja alrededor de la mesilla de noche). Un poco de sentido común a la hora de consultar (y ¡¡redactar!!) este tipo de páginas no vendría mal...

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay que ver la de puestos de trabajo que da el no tener trabajo (en todos los sentidos)!

admin dijo...

Está claro, pero me parece que en este caso, se han pasado un poco con sus "consejillos", ¿no?

la doctora yvonne dijo...

Bueno, la verdad es que a mi me gustaron algunas cosas del artículo, como por ejemplo el asunto de los colores de la ropa. Naranja para parecer alguien que es bueno trabajando en equipo. Nunca se me había ocurrido. Rojo para parecer activo, verde para la creatividad. ¿No les parece útil?

admin dijo...

doctora: eso de los colores quizás sea lo único que tenga cierta utilidad y sentido de todo el texto, me temo...

Anónimo dijo...

Bueno, lo de los colores... tuve que descartar una corbata verde que tenía. Me miraban como si me hubiese colgado una placenta de ornitorrinco.

Es que hay gente tan estructurada...